15 agosto, 2016

VIVIR CON LOS OJOS BIEN ABIERTOS O QUIZÁS CERRARLOS PARA PODER SEGUIR VIVIENDO...

Paro y miro,
quiero tenerlos bien abiertos para no perderme nada,
para ver los colores, los paisajes, la gente,
el sol, la luna, el mar...

Paro y miro, sí,
sigo queriendo tenerlos bien abiertos,
para aprender, observar,  disfrutar,
para vivir, gritar, soñar...

Paro y miro,
pero dueleeeee!!!!duele la sangre, el  miedo,
la soledad, el añorar, el ver llorar...
pero sobre todo duele ver marchar...

Paro y no miro...
todavía sigo queriendo tenerlos bien abiertos,
pero cuando duele mucho lo que veo,
elijo cerrarlos para poder seguir viviendo...




Volvemos después de unas semanas atareadas, en las que no he podido escribir. Esta ilustración es en recuerdo a un familiar, llevaba tiempo con la idea en mente pero faltaba realizarla.
Ciertas cosas en la vida vienen de repente, y se te clavan en el alma. No era la primera vez que vivía una situación así, ya que hace catorce años sucedió algo parecido pero lo que hace el paso de estos catorce años...supongo que uno madura...a mi no me gusta decirlo así, prefiero decir que uno comienza a darse cuenta de que el tiempo corre de verdad, y te haces la pregunta : ¿en qué consiste esto de vivir?
Muchas veces me lo cuestiono, y me respondo...disfrutar con la familia y amigos, hacer lo que a uno le entusiasma...Paro a ver qué me ilusiona de verdad, qué busco yo en mi...algunas tienen repuesta fácil otras...
Me digo a mi misma voy a ser lo más alegre posible, no me voy a enfadar, voy a aprovechar cada segundo...pero por ahora esto es lo que más difícil me está resultando. En el día a día no puedo estar siempre contenta, ni puedo aceptar todo como viene y no enfadarme, lo siento pero no, la realidad no es así de fácil. Incoherencias de la vida...